lunes, 30 de agosto de 2010

Os dejo un video que hizo el ICBF (Instituto Colombiano de Bienestar Familiar) sobre el proceso de adopción.



Buff, ver esas caras de los niños te remueve todo por dentro.

Te quiero

Mañana a las 18:30 de la tarde hace 8 años que entramos en ese Palacio a decir que sí, que queríamos seguir juntos y que queríamos hacerlo oficial firmando una pila papelajos.
Estaba feliz, porque sabía que era la decisión más acertada y de la única que he estado tan segura en mi vida y 8 años después solo puedo confirmarlo, eres mi vida y lo sabes.
Sabéis la tranquilidad que sientes cuando ves que sí, que esa es la persona, que eso del amor existe, que no solo es cariño y costumbre, que se te revuelven las tripas si piensas que le puede pasar algo y no podrás soportarlo, que se te sigue erizando la piel cuando te toca, que necesitas que sea feliz para serlo tú misma…y tantas cosas.
Un amigo leyó en nuestra boda el poema de Vicente Aleixandre Se querían, pero cambio el tiempo verbal por Se quieren…


Se quieren.
Sufren por la luz, labios azules en la madrugada,
labios saliendo de la noche dura,
labios partidos, sangre, ¿sangre dónde?
Se quieren en un lecho navío, mitad noche, mitad luz.
Se quieren como las flores a las espinas hondas,
a esa amorosa gema del amarillo nuevo,
cuando los rostros giran melancólicamente,
giralunas que brillan recibiendo aquel beso.
Se quieren de noche, cuando los perros hondos
laten bajo la tierra y los valles se estiran
como lomos arcaicos que se sienten repasados:
caricia, seda, mano, luna que llega y toca.
Se quieren de amor entre la madrugada,
entre las duras piedras cerradas de la noche,
duras como los cuerpos helados por las horas,
duras como los besos de diente a diente solo.
Se quieren de día, playa que va creciendo,
ondas que por los pies acarician los muslos,
cuerpos que se levantan de la tierra y flotando...
Se quieren de día, sobre el mar, bajo el cielo.
Mediodía perfecto, se querían tan íntimos,
mar altísimo y joven, intimidad extensa,
soledad de lo vivo, horizontes remotos
ligados como cuerpos en soledad cantando.
Amando. Se quieren como la luna lúcida,
como ese mar redondo que se aplica a ese rostro,
dulce eclipse de agua, mejilla oscurecida,
donde los peces rojos van y vienen sin música.
Día, noche, ponientes, madrugadas, espacios,
ondas nuevas, antiguas, fugitivas, perpetuas,
mar o tierra, navío, lecho, pluma, cristal,
metal, música, labio, silencio, vegetal,
mundo, quietud, su forma. Se quieren, sabedlo.


Pues eso…que TE QUIERO y espero pasar no 8 sino 80 años más a tu lado.

jueves, 26 de agosto de 2010

Proyectos solidarios en África

Por medio del blog de Gisela http://caminemcapavosaltres.blogspot.com/ he llegado a esta página de Judit y su proyecto en África.
Le copio la información a Gisela

Me llamo Judit Besora Tondo, tengo 25 años y soy de Valls. Después de pasar un mes en un campo de trabajo en Sudáfrica el pasado verano, he decidido dar un paso más e intentar poner mi pequeño granito de arena para conseguir un mundo mejor. Estoy intentando sacar adelante un proyecto educativo en un asentamiento marginal en las afueras de Ciudad del Cabo. Yo soy profesora de inglés y mi proyecto consiste en dar clases de inglés gratuitas para jóvenes con pocos recursos que necesitan el inglés como herramienta básica para poder encontrar trabajo. El proyecto está presupuestado en € 7500 y desde hace aproximadamente un Mes y medio estoy organizando conciertos y charlas para conseguir fondos para el proyecto. A día de hoy, he conseguido € 2,119.25, pero todavía hay mucho trabajo por hacer. Hacer difusión es una de las mejores maneras para llegar al máximo número de gente y lograr el objetivo. Os agradecería que le tomáramos una par de minutos para hacer un vistazo a la web donde está toda la información sobre el proyecto. www.juditiafrica.com
Muchas gracias por adelantado,
Judit Besora Tondo.


Mucha suerte Judit y que consigas tu objetivo.

martes, 24 de agosto de 2010

Las locas de la colcha

No puedo hablar de la colcha de los 100 deseos sin nombraros a estas amigas de colcha etiopia, es un grupito muy majo que he conocido gracias a la colcha de los 100 deseos y los intercambios. Hay de todo, unas más locas (entre las que me incluyo), otras más serias, las que despiertan ternura...
Muchas tienen ya aquí a sus niñ@s, preciosos todos y todas que quereis que os diga, guapaos a rabiar, Kalkidam, Naros, Victor, Talaku, Aynalem...se me olvida alguno seguro, con unas madres estupendas, Victoria, Bea, Pili, Neus..

Luego las que esperamos, Gisela, Laura, Vero, Anuska, Lola, Paloma, que estoy convencida que van a ser unas madres extraordinarias. Solo conozco a Anuska personalmente, pero a las demas es como si las conociera de hace mucho tiempo.

Un besazo guapas y ya vereis que poquito a poco todas lo vamos consiguiendo.

Esther

Como os dije que os hablaría de ella y acabo de recibir un email suyo, pues que mejor momento.
Esther es una de esas muchas personas que conoces en este camino tan largo de la adopción.
Hemos conocido amigos geniales como Mari, que con Toñin han formado una maravillosa familia con Sandra y Natalia 2 preciosidades que llegaron por el mismo camino de la adopción aunque de diferentes lugares, parece que les conoces de toda la vida aunque solo haga 2 años que están en tu vida, igual que Lidia y Luciano que tienen a Nico, un príncipe vietnamita precioso, son muy especiales para nosotros y lo saben, os hablare más de ellos en otro momento.
Pero quería hablaros hoy especialmente de Esther. Está empezando en esto de la adopción como monoparental y nos conocimos a través de un foro hace aproximadamente 6 meses, Esther es muy especial, es muy honesta consigo misma sobre todo, sé que ha tomado decisiones en su vida que mucha gente no ha entendido y ha sido muy valiente al hacerlo.
La última ha sido aprovechar sus vacaciones para irse de voluntaria a India y ayudar en lo que pueda unos cuantos días.
Creo que está siendo muy duro, estoy segura, aunque en los emails se hace la fuerte y no quiere que nos preocupemos en exceso, por lo que la conozco (creedme que mucho) sé que lo está pasando regular, no me refiero a la miseria ni a las incomodidades que te supone el estar allí, sino porque conociéndola sé que se la está partiendo el alma con todo lo que está viendo. No sé quien dijo que si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento, creo que eso es lo que hace. La conteste a uno de sus emails que entiendo que para soportar ver esas cosas, negar el dinero a un chiquillo en la calle que te pida para comer, o a una madre desesperada, etc., deberás dejar el corazón en la mesita del hotel cuando sales por la mañana para poder afrontar el dia y la rogue que no se olvidara de recogerlo a la vuelta, queremos que vuelva la misma Esther, mas concienciada, más generosa si cabe, más sabiendo apreciar todo lo que tiene, pero la misma.
Hubo varios momentos por la preocupación de lo que estaba pasando en India con las inundaciones y todo eso que la pedí varias veces que se lo pensara, que no fuera, mis argumentos eran que podía ser peligroso, pero solo (y ahora que no está os lo digo) era egoísmo por mi parte, no quería prescindir de hablar con ella todos los días, ni si me siento mal llamarla y acabar las 2 riéndonos por cualquier tontería...o llorando...o riendo y llorando que también ha pasado y Javi decía que estábamos locas.
Pero ella no me hizo caso(para variar)y allí anda, dando de comer a mujeres deformadas, a chiquillos con problemas y metiéndosela ese olor a miseria hasta el alma y me alegro muchísimo por esos niños y esas mujeres, porque seguro que aunque sea un minuto les alegra algo el corazón esa niña con acento andaluz. Porque decía Teresa de Calcuta que en el mundo hay más hambre de amor y de estima que de pan.

Que estoy muy orgullosa de ella y quería decirlo, me parece muy, muy valiente y muy generoso por su parte.

Un besazo guapa y vuelve pronto

La aventura de convertirse en familia

Ayer me envió Esther (ya os hablaré de ella) el libro de Beatriz San Román La aventura de convertirse en familia ya que habíamos hablado las 2 de comprarlo porque parece bastante interesante y por la tarde no pude evitarlo y empecé a leerlo, de momento lo que leí me está gustando, aunque igual es por mi interés sobre todo lo que tiene que ver con la adopción y lo que me empapo de todo tipo de cosas en internet, artículos, blogs, experiencias de otras familias, que me pareció un pelín obvio  el tema de las recomendaciones en "la espera". Pero seguro que me encanta ya que me gusta mucho la forma sencilla que tiene de expresarse la autora. Ya os contare cuando lo acabe, de momento empezare el capitulo "De la institucionalización a la familia" y leí un trocito que me llamo la atención...

"Durante la espera para reunirme con mi hija, acudí a una conferencia sobre los efectos de la  institucionalización a cargo de un especialista en adopción. El auditorio estaba lleno de familias que, como yo, apenas sabían nada sobre el tema. Una mujer preguntó qué posibilidades había de que su hija, que llegaría a su nuevo hogar procedente de China con apenas 2 años, fuera normal. La respuesta del conferenciante fue tajante: CERO".

Suena fuerte ¿verdad?  leí las 2 frases siguientes para entender a que se refería y tengo muchas ganas de seguir haciéndolo. Continuara...

Blanqui

sábado, 21 de agosto de 2010

Colcha de los 100 deseos o Bai Jia Bei


“La última emperatriz de la dinastía Quing fue una simple concubina hasta el día que tuvo la suerte de dar a luz al único hijo varón del emperador.
Durante un tiempo se vio forzada a dejar solo a su hijo y concibió un plan para protegerle de las viejas esposas del emperador y obligar a las poderosas familias Manchúes a cesar en su empeño de reclamar el trono:
A cada uno de los jefes de los cien clanes más poderosos del Imperio le pidió una bobina de la mejor seda. Encargó a los costureros del palacio que cortaran estas piezas en pedacitos más pequeños y con éstos trozos hacer un traje para su hijo. Así, simbolicamente, pertenecería a cada una de estas cien nobles y poderosas familias. Y bajo su protección los dioses no osarían hacerle daño”
En el Norte de China esta leyenda se ha convertido en una tradición: HACER UN BAI JIA BEI, invitando a 100 amigos y familiares a contribuir con un retal cuadrado de tela y acompañado por un deseo. Los 100 trozos, cosidos juntos, se convierten en un edredón que contiene la SUERTE, ENERGÍA Y LOS BUENOS DESEOS de todas las personas que han contribuído a su confección. 
Según la tradición la manta pasará de generación en generación.


Bienvenidos

Bienvenidos a nuestro blog, nace con la idea de compartir el sueño que hace tiempo intentamos cumplir, el de ser los orgullosos padres de dos pequeñ@s de origen colombiano.
El nombre del blog se debe como habeis visto a una leyenda colombiana en la que Mirthayú es cedida a los Taironas para que la crien y a la que acaban convirtiendo en su reina.
Estamos ansiosos de que algún dia los dioses  colombianos nos elijan para criar, proteger, educar y sobre todo amar a dos de sus pequeñ@s.
Esperamos que os guste el blog.

viernes, 20 de agosto de 2010

Mirthayú, el sueño de Matambo (Colombia)

Mirthayú
Hace muchísimos años el Cacique Tairón, vecino de los Michúes tenía como rutina ofrecer un sacrificio. En uno de ellos, apareció de repente una nube que esparcía rayos de mil colores. Entre más se acercaba, era más fácil distinguir que en su seno iba una mujer muy hermosa. Tairón y su tribu cayeron de rodillas, lanzando exclamaciones y gritos de alegría, pues creyeron que llegaba a ellos el dios a quien le estaban ofreciendo el sacrificio.

La dicha aumentó cuando la deslumbrante dama le entregó a Tairón y a su tribu una tierna niña y las instrucciones precisas para criarla y forjar su futuro. Los Taironas dedicaron toda su atención y esmero a la crianza de esta hermosa criatura y por nombre le pusieron Mirthayú y la eligieron como su única reina.
Mirthayú se convirtió en la adoración de los Michúes por su belleza, personalidad y el amor que manifestaba hacia su tribu. Pero un día llegó un gigante llamado Matambo, que se encargó de sembrar el terror en la tribu de los Taironas. Ellos, ante aquella amenaza, recurrieron presurosos a su reina y le suplicaron que interviniera ante el inminente peligro.

Mirthayú se enfrento al gigante y éste al verla quedo hipnotizado por su belleza. Entonces, inclinó reverente su cabeza ante la reina y le pidió disculpas por el atropello que estaba cometiendo contra los suyos. Así todo volvió a quedar en paz armonía.

Entre Mirthayú y Matambo nació una amistad que después se convirtió en amor. Juntos resolvieron viajar al macizo colombiano, guiados por el hilo brillante formado por las aguas del rió Guacacalló, hasta llegar a su nacimiento. Al regresar, el gigante tuvo que enfrentarse a la tribu de los valientes Michúes, quienes se opusieron a que Matambo cruzara por sus predios.

Para evitar que algo le pasara a su amada, Matambo le pidió que se alejara hacia los cerros del oriente para que desde allí observara su triunfo o su derrota. Sin embargo, desde lejos, Mirthayú vio como miles de Michúes atacaban a su amado. La pelea terminó cuando el gigante cayó estruendosamente al suelo. Mirthayú desesperada intentó prestarle ayuda y le pidió apoyo a su jefe Tairón, pero todo fue en vano.

La reina recurrió a los hechiceros para que le devolvieran la vida a su amado, pero ellos nada pudieron hacer. Recorrió los senderos en busca de auxilio y arrancó su rubia cabellera, el viento se la arrebató de las manos y la esparció por la zona cercana dando origen a los farallones y altares que hoy se observan al llegar al municipio de Gigante, en el Huila.

Mirthayú desfalleciente y de rodillas pidió protección a Tairón y a sus dioses y cuando menos lo esperaba se aproximó una nube de colores de la que descendió su madre. Ésta la tomó entre sus brazos, limpió sus lágrimas y la acompañó en su llanto. Pero Mirthayú se desplomó sobre el suelo y murió.

La reina pronto entregó su alma al creador del universo. La cabeza de Mithayú quedó hacia el oriente, los pies sobre el río Guacacallo, la mirada prolongada al infinito y los senos desnudos y desafiantes, como dos pirámides enfrentadas al sol. Hoy, después de muchos años, Mirthayú y Matambo están convertidos en dos enormes rocas encantadas, visibles desde la carretera central del Huila. Ella con sus atractivos "senos de reina" y él con la perfección de su perfil, ambos mirando hacia el cielo.